En nueve temas hablo de cómo las presiones demoniacas afectan la salud, la vida afectiva y la economía. Muchas veces se originan por participar en cultos satánicos, sesiones espiritistas, juego de la ouija y esoterismo en general.
Para contrarrestar todo esto, hay que rezar diario el Rosario, comulgar diario y meditar la palabra de Dios mediante la Lectio divina y recibir oraciones de sanación hechas por sacerdotes o grupos de intercesión.